Hay siete mandamientos que la tradición rabínica considera como la mínima obligación moral de todos los hombres. Los judíos deben observar los 613 mandamientos de la Torá, pero aquellos gentiles que acepten estas siete obligaciones, se les considerará como hijos del pacto que Dios hizo con Noé y se les asegurará un lugar en «El Mundo Venidero» (Olam Habá). Estas reglas, conocidas como las “Leyes de Noé”, extienden el mandato divino al entorno no judío.
Estos siete mandamientos se basan en versículos de la Torá, como Génesis 2:16,17, donde Dios le prohíbe al hombre el comer del árbol de la ciencia del bien y del mal, Génesis 9:4 y 6, que dicen: “Pero carne con su vida, que es su sangre, no comeréis” y “El que derramare sangre de hombre, por el hombre su sangre será derramada.”, y Levítico 24:15 que dice: “Cualquiera que blasfeme contra su Dios llevará su culpa.”
La tradición oral recopilada en el Talmud, nos habla de cómo nuestros sabios interpretaron estos versículos en varios tratados, como en Breishit Rabbah 34:8 que dice: “R. Aivu dijo: A los hijos de Noé se les ordenó siete cosas: [No a la…] idolatría, incesto, asesinato, maldición del Nombre Divino [blasfemia], derecho civil y una extremidad arrancada de un animal vivo. El rabino Chanina ben Gamliel dice: también sobre la sangre de un animal vivo. El rabino Eleazar dice: también contra la mezcla de especies. El rabino Shime’on ben Yochai dice: también contra la brujería. El rabino Yochanan ben Beroka dice: también contra la emasculación. El rabino Assi dijo: Los hijos de Noé fueron ordenados con respecto a todo lo que se dice en la oración: ‘No se encontrará entre ustedes a nadie que haga pasar a su hijo o hija por el fuego.” (Deuteronomio 18:10)
Las siete leyes de Noé aceptados por la mayoría de nuestros sabios son:
- No practicar la idolatría.
- No usar el nombre de Dios en vano. No blasfemar.
- No Matar. No derramar sangre.
- Evitar las relaciones sexuales prohibidas.
- No robar o asaltar.
- No comer carne de un animal vivo.
- El establecer cortes de justicia, o sea un sistema legal.
Maimónides considera a los justos de las naciones como aquellos que tendrá una parte en el mundo venidero, aunque no sean judíos, con la condición de que cuiden estas leyes. Él decía que ellos tienen derecho a todo el apoyo moral y material de la comunidad judía y a recibir los honores más altos. Pensadores modernos como Moisés Mendelssohn y Hermann Cohen subrayaron cómo las Leyes de Noé marcaron una base común entre el pensamiento gentil y el pensamiento judío.
Por: Marcos Gojman.
Bibliografía: Rabino Yaakov Menken “The everything Torah Book”, Jeffrey Spitzer “The Noahide Laws” y otras fuentes.