191. Haim Najman Bialik, una identidad judía con muchas facetas.

Haim Nahman Bialik (1873-1934), uno de los principales poetas del hebreo moderno, nació en el pueblo de Radi, en Ucrania, en aquel entonces parte del Imperio Ruso. A la edad de seis años, su familia se mudó a Zhitomir. Al año su padre falleció y Bialik se fue a vivir con su abuelo paterno, quien le dio una educación ortodoxa. Al principio estudiaba con los maestros tradicionales del heder, la escuela religiosa para niños, pero a partir de los 13 años fue un autodidacta. Estudiaba solo en la cada vez más vacía yeshivah en las afueras del pueblo. Al tiempo que estudiaba la literatura rabínica, empezó a leer sobre teología medieval y sobre la Haskala, la Ilustración judía.

A los l5 años convenció a su abuelo de que lo mandara a estudiar a la yeshiva de Volozhin, donde empezó por su cuenta a leer poesía rusa y literatura europea y donde escribió su primer poema “El Hatzipor”, “Al pájaro”. Pronto se afilió a una sociedad estudiantil secreta que buscaba integrar al sionismo y a la ilustración con la tradición ortodoxa, siguiendo las enseñanzas de Ahad Haam.

En el verano de 1891 se trasladó a Odessa, atraído por el circulo intelectual que se había formado alrededor de Ahad Haam. Buscaba con eso, prepararse para ingresar al seminario ortodoxo moderno de Berlín. Para mantenerse, daba clases de hebreo, al tiempo que leía a Pushkin, Dostoevsky y Gogol. Aprendió gramática alemana y leyó a Schiller y Lessing. Logró que Ahad Haam leyera sus poemas y que fueran publicados en el primer volumen de “Ha Pardes”. A principios de 1892 se enteró que la yeshivah de Volozhin había sido cerrada y regresó a Zhitomir para encontrar a su abuelo moribundo. No quería que él se enterara de que había abandonado sus estudios.

En 1893, se casó con Manya Averbuch. Bialik aprovechaba el tiempo que pasaba en los bosques por asuntos del negocio maderero de su suegro, para escribir poemas que mezclaban imágenes de la vieja tradición con el nuevo Israel. Entre 1897 y 1900 trabajó como maestro en Sosnowiec, un pueblo cerca de la frontera con Prusia. Ahí empezó a escribir cuentos y también a escribir en yidish. En 1900 encontró trabajo como maestro en Odessa, donde conoció a personalidades como Mendele Mojer Sforim, Simon Dubnow, Haim Tchernowitz y otros. Tradujo la obra de Mendele del yidish al hebreo, así como obras de Shakespeare, Schiller, Cervantes y Heine. En 1903, después del terrible pogrom en Kishiniev, escribió el poema épico “En la ciudad de la matanza”, donde condenó la matanza, pero también la pasividad de las víctimas. En 1908 editó con Yehoshua Ravnitzky “Sefer Ha Agadah”, un compendio de leyendas del Talmud y del Midrash. Vivió en Odessa hasta 1921, cuando pudo salir a Berlín gracias a Máximo Gorki y después, en 1924, emigrar a Israel. Fue miembro de la junta de gobierno de la Universidad Hebrea. Murió en 1934.

Bialik amaba el judaísmo religioso tradicional que aprendió con su abuelo. También creía en el sionismo, especialmente el enfoque cultural de Ahad Haam. Entendía que había que resolver el problema social de los judíos en la diáspora, pues vio con sus propios ojos la tragedia del pogrom de Kishiniev. Sabía que el yiddish era parte de la cultura judía, pero también que el hebreo era el idioma del futuro. Con la Haskala, se dio cuenta que el judaísmo no podía aislarse de la cultura secular del mundo. Y a través de sus poesías, integró todas esas identidades en una. Bialik es un ejemplo de cómo se puede tener una identidad judía con muchas facetas.

Por Marcos Gojman.

Bibliografía: Encyclopaedia Judaica y otras fuentes.

Esta entrada fue publicada en Al reguel ajat. Guarda el enlace permanente.

Una respuesta a 191. Haim Najman Bialik, una identidad judía con muchas facetas.

  1. Kugelmann Ester L. dijo:

    Necesitaría la poesía » el hatzipor» en IDISH. Gracias

Deja un comentario